Sobre Casamientos
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Los matrimonios al aire libre son eventos maravillosos, pues se tiene mayor contacto con la naturaleza y se puede elegir la decoración, dependiendo los intereses de la pareja y de su familia.
Los lugares para realizar un casamiento al aire libre son diversos: una playa a orillas del mar, un jardín lleno de flores, una terraza, un campo amplio, una finca, un parque, un museo o un salón con un espacio al aire libre. Lo importante del asunto es elegir el sitio más agradable y decorarlo con los elementos más significativos para los futuros esposos.
La decoración al aire libre.
Estas bodas son llamativas y fáciles de realizar. Es buena idea que la decoración del sitio esté relacionada con la naturaleza: el color verde es un complemento perfecto para el lugar. Por ejemplo, los accesorios de la novia y los arreglos de la ceremonia deben verse ecológicos, delicados y encantadores.
Las mesas deben lucir sencillas y elegantes, los muebles de madera, los parasoles de color verde o colores pasteles, los manteles en tonos claros y con estampado de flores o cuadros y los centros de mesa llamativos, son tendencias actuales y sumamente atractivas.
Las flores deben predominar en la decoración, aquellas de color blanco, naranja, rosado y amarillo suelen ser las más acertadas. Las mesas centrales y las sillas de los novios, se pueden vestir con un hermoso y colorido arreglo floral, todo esto combinará a la perfección con la naturaleza del sitio.
Las velas de citronella o bastones son un accesorio fundamental, pues además de ambientar el lugar, serán un repelente para los insectos que merodean los jardines, los invitados lo agradecerán.
Si la boda es de noche, los arboles pueden ser decorados con luces, de esta forma lucirán hermosos y le darán un toque vintage al evento.
Otras recomendaciones.
– Es importante indagar sobre el clima del lugar, para así evitar molestos inconvenientes. En cualquier caso, es adecuado contar con carpas o un pequeño salón donde los invitados puedan refugiarse mientras llueve.
– Hay que probar con anticipación el sonido, para estar seguros que mientras suena la música, los invitados no tendrán que gritar para hablar con los otros.
– Los encargados en servir la comida deben ser expertos en las bodas al aire libre. Si no se da un buen manejo a los alimentos, estos se pueden arruinar y generar una molestia a los anfitriones.
