Según la tradición el velo representa el paso de niña a mujer y que esta comenzará una nueva vida junto a la persona que ella escogió para pasar el resto de su vida. Hay diferentes tipos de velos y cada uno se acomoda a ciertos tipos de vestidos o gustos. Largos o cortos, veremos cuál es la diferencia entre ellos y cuál viene mejor para cada estilo.
El velo es uno de los elementos que le aporta delicadeza al vestido de novia. Entre los factores que debes tener en cuenta al elegir el estilo son: la forma de tu rostro, el estilo del vestido y tu estatura. El diseño puede ser del más sencillo usando simplemente tul blanco, o al mas elaborado con encajes decorando el velo.
Tipos de velo
Velo tipo capilla: es el velo tradicional que va desde la cabeza hasta el suelo sin llegar a sobrepasar la falda del vestido. Este velo se aconseja usa cuando el vestido no tiene alguna decoración importante en la espalda, ya que de otra forma no se vería mucho. Perfecto para novias de rostro redondo.
Velo tipo catedral: es un poco más largo que el de capilla, proporciona elegancia en la espalda de la novia. Los velos de este estilo se ven mejor en tul fino y al igual que el anterior, debe usarse con vestidos sin mucho detalle en la espalda. Perfecto para novias de rostro cuadrado.
Velo de puntos al codo: se trata de un velo intermedio ya que no sobrepasa los codos. Por ello se trata de un velo de novia muy cómodo de usar, ya que no se arrastra, y es perfecto para las novias de rostro ovalado.
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